De guardaespaldas armado a galeote, de esposo amoroso a padre y ardiente predicador, Juan Knox fue movido por una pasión incansable por el honor de Dios y la pureza de su verdad y adoración. No obstante, cuando era un escolar creciendo en el pequeño pueblo escocés de Haddington, jamás habría imaginado que llegaría a ser un líder prominente del poderoso movimiento que transformó Escocia en uno de los países protestantes más comprometidos del mundo. Simonetta Carr cuenta la historia de cómo este gran reformador, cuya vida comenzó humildemente en un lugar remoto y misterioso, influyó la iglesia y sus creencias más allá de las fronteras de Escocia, dando forma a nuestro pensamiento incluso hoy.